aquí vuelvo nuevamente para publicar mi primer fic serial >w<
Este es un Fanfic que comencé a escribir a finales del 2011 pero debido a muchas circunstancias no pude continuarlo, nació como un fanfic de Junjou romantica pero ya que tomé nuevamente la iniciativa de continuar con él, decidí cambiarlo de parejas XD
Espero que sea de su agrado y espero publicar el siguiente capítulo la siguiente semana ;)
Tema: ~Seduciendo a mi profesor~
Extensión: Serial
Parejas: Takachii/Inoodai/Yamajima
Autora: Akari-chan
Capítulo 1
- ¡Onii-chan! - decía un pequeño niño corriendo hacia la persona que acababa de nombrar.
- ¡Yuri-chan! ¿Cómo has estado? - decía el mayor mientras abrazaba el frágil cuerpo del menor.
- Bien, pero te extrañé mucho onii-chan - apegándose más al cuerpo del mayor.
- Pero si solo han pasado 5 días - sonriendo -
- Si, pero... - apartándose del abrazo, con la mirada baja y un notable rubor en sus redondas mejillas - todo es tan aburrido cuando tú no estás.
- Pues te prometo que durante todo este fin de semana recuperaremos el tiempo perdido, ¿vale? - acariciando los suaves cabellos del pequeño.
- Siiiiiiii, onii-chan - esbozando una gran sonrisa y agarrando la mano del mayor para conducirlo al amplio jardín detrás de la mansión.
Takaki en ese entonces era el prometido de la hermana mayor de Yuri y todos los fines de semana y en vacaciones se quedaba en la mansión; ya que era un buen amigo de la familia y gracias a eso había entablado una sólida amistad con el más pequeño de la casa. Pero había algo que estaba comenzando a atormentarlo, haciendo que aquel fin de semana fuera el último en pasar con la familia, rompiendo inmediatamente el compromiso con su prometida, desapareciendo sin dejar rastro y dejando a un triste y desconsolado Yuri.
Seis años después
Después de la desaparición de Onii-chan, mis padres tomaron la decisión de mudarnos a la ciudad de Tokio, para que mi hermana y yo no siguiéramos sufriendo por su ausencia. Pero al poco tiempo de estar allá mi hermana ya había conseguido un nuevo novio con el que dos años después se casó; eso me hizo enojar un poco ya que me hizo dudar del supuesto amor que ella profesaba por Onii-chan. Tiempo después entré a la secundaria y conocí a mis dos mejores amigos Ryosuke y Yuto, gracias a ellos pude superar un poco mi tristeza, pero no había ni un solo día sin pensar en él, yo lo amaba y todavía lo amo, no entiendo porque se fue.
Actualmente tengo 16 años y voy a cursar primer año de preparatoria en un prestigioso instituto para "niños ricos" solo para varones que queda a 15 minutos en automóvil desde mi casa, estoy muy emocionado y a la vez triste ya que este año no estaré en la misma aula con mis amigos porque ellos quedaron juntos pero en una diferente a la mía, pero igual acordamos en vernos a la hora del almuerzo y los fines de semana para formar un grupo de estudio y si nos quedaba tiempo ir a salir a algún lado. Al llegar al instituto, bajé del auto y le dije al chófer que lo llamaría para que me recogiera y sin más entré al enorme edificio.
- ¡Chineeeeeeeeeeeeeeen! - gritaba un escandaloso peli castaño mientras lo abrazaba - ha pasado mucho tiempo.
- Hola Yama-chan gusto en verte - correspondiendo el abrazo.
- Buenos días Chinen - decía un chico de cabello negro un poco más alto que ellos haciendo una reverencia.
- Hola Yuto, que alto estás, has crecido mucho en tan poco tiempo no sabes cuánto te envidio - haciendo un puchero.
- Jajaja ya verás que crecerás muy rápido - sonriendo.
- Pues no te creemos, llevas diciéndonos eso desde que nos conocemos - decía el castaño - cierto Chinen?
- Si claro, es muy cierto.
- Ahhh bueno entonces lo siento por decirles mentiras - haciendo una reverencia - no volverá a pasar.
En ese momento suena el timbre que indicaba el inicio de clases.
- Creo que ya es hora de irnos - decía el castaño.
- Si, nos vemos en el almuerzo. - y así cada uno se dirigió a su respectivo salón de clases, Yuri tomó asiento en uno de los puestos disponibles y sacó un libro para comenzar a leerlo mientras esperaba la llegada del profesor, pero no se pudo concentrar bien ya que el resto de sus compañeros hacían mucho ruido, pero ni modo de gritarles para que hicieran silencio ya que eso lo metería en problemas y esa era una de las cosas que menos quería. Pero después de un rato todos ya se habían sentado cuando miraron que se acercaba el Director junto con el que sería su maestro.
- Muy buenos días jóvenes.
- Buenos días Director - decían todos haciendo una reverencia.
- Hoy tengo el gusto de presentarles a su tutor y profesor de literatura - sonriente - por favor pasa. - entró al aula un hombre alto de cabello castaño claro y ojos negros y fue en ese momento en donde las miradas de él y Yuri se volvieron a encontrar iniciando nuevamente su historia.
- ¡Yuri-chan! ¿Cómo has estado? - decía el mayor mientras abrazaba el frágil cuerpo del menor.
- Bien, pero te extrañé mucho onii-chan - apegándose más al cuerpo del mayor.
- Pero si solo han pasado 5 días - sonriendo -
- Si, pero... - apartándose del abrazo, con la mirada baja y un notable rubor en sus redondas mejillas - todo es tan aburrido cuando tú no estás.
- Pues te prometo que durante todo este fin de semana recuperaremos el tiempo perdido, ¿vale? - acariciando los suaves cabellos del pequeño.
- Siiiiiiii, onii-chan - esbozando una gran sonrisa y agarrando la mano del mayor para conducirlo al amplio jardín detrás de la mansión.
Takaki en ese entonces era el prometido de la hermana mayor de Yuri y todos los fines de semana y en vacaciones se quedaba en la mansión; ya que era un buen amigo de la familia y gracias a eso había entablado una sólida amistad con el más pequeño de la casa. Pero había algo que estaba comenzando a atormentarlo, haciendo que aquel fin de semana fuera el último en pasar con la familia, rompiendo inmediatamente el compromiso con su prometida, desapareciendo sin dejar rastro y dejando a un triste y desconsolado Yuri.
Seis años después
Después de la desaparición de Onii-chan, mis padres tomaron la decisión de mudarnos a la ciudad de Tokio, para que mi hermana y yo no siguiéramos sufriendo por su ausencia. Pero al poco tiempo de estar allá mi hermana ya había conseguido un nuevo novio con el que dos años después se casó; eso me hizo enojar un poco ya que me hizo dudar del supuesto amor que ella profesaba por Onii-chan. Tiempo después entré a la secundaria y conocí a mis dos mejores amigos Ryosuke y Yuto, gracias a ellos pude superar un poco mi tristeza, pero no había ni un solo día sin pensar en él, yo lo amaba y todavía lo amo, no entiendo porque se fue.
Actualmente tengo 16 años y voy a cursar primer año de preparatoria en un prestigioso instituto para "niños ricos" solo para varones que queda a 15 minutos en automóvil desde mi casa, estoy muy emocionado y a la vez triste ya que este año no estaré en la misma aula con mis amigos porque ellos quedaron juntos pero en una diferente a la mía, pero igual acordamos en vernos a la hora del almuerzo y los fines de semana para formar un grupo de estudio y si nos quedaba tiempo ir a salir a algún lado. Al llegar al instituto, bajé del auto y le dije al chófer que lo llamaría para que me recogiera y sin más entré al enorme edificio.
- ¡Chineeeeeeeeeeeeeeen! - gritaba un escandaloso peli castaño mientras lo abrazaba - ha pasado mucho tiempo.
- Hola Yama-chan gusto en verte - correspondiendo el abrazo.
- Buenos días Chinen - decía un chico de cabello negro un poco más alto que ellos haciendo una reverencia.
- Hola Yuto, que alto estás, has crecido mucho en tan poco tiempo no sabes cuánto te envidio - haciendo un puchero.
- Jajaja ya verás que crecerás muy rápido - sonriendo.
- Pues no te creemos, llevas diciéndonos eso desde que nos conocemos - decía el castaño - cierto Chinen?
- Si claro, es muy cierto.
- Ahhh bueno entonces lo siento por decirles mentiras - haciendo una reverencia - no volverá a pasar.
En ese momento suena el timbre que indicaba el inicio de clases.
- Creo que ya es hora de irnos - decía el castaño.
- Si, nos vemos en el almuerzo. - y así cada uno se dirigió a su respectivo salón de clases, Yuri tomó asiento en uno de los puestos disponibles y sacó un libro para comenzar a leerlo mientras esperaba la llegada del profesor, pero no se pudo concentrar bien ya que el resto de sus compañeros hacían mucho ruido, pero ni modo de gritarles para que hicieran silencio ya que eso lo metería en problemas y esa era una de las cosas que menos quería. Pero después de un rato todos ya se habían sentado cuando miraron que se acercaba el Director junto con el que sería su maestro.
- Muy buenos días jóvenes.
- Buenos días Director - decían todos haciendo una reverencia.
- Hoy tengo el gusto de presentarles a su tutor y profesor de literatura - sonriente - por favor pasa. - entró al aula un hombre alto de cabello castaño claro y ojos negros y fue en ese momento en donde las miradas de él y Yuri se volvieron a encontrar iniciando nuevamente su historia.
Continuará...
Gracias >w<
Tjtakachiii!!!!! Muy bueno. Me gusta este fic si que si
ResponderEliminar*o* no lo puedo creer pobre Yuri
ResponderEliminarpero se encontraron de nuevo ♥