Lamento mucho la demora, pero he estado bastante ocupada últimamente, pero realmente feliz por cosas que me han pasado, entre ellas la confirmación del NaruHina, aunque ya vivía resignada, me alegré demasiado y todavía tengo esa sonrisa de Idiota XD
Y para no alargarme más, aquí les traigo el nuevo capítulo de Musekinin Hero que ya prácticamente le quedan pocos, espero terminarlo para antes de navidad y muchas gracias por leerlo y dejar sus comentarios no saben lo mucho que me alegra y cómo siempre este capítulo va dedicado a Wen-chan y Mimi-chan y también espero que les guste el nuevo diseño del blog a cargo de mi queridísima Lyly que espero que vuelva pronto con sus fics que me encantan y que lo disfruten :D
Tema: Musekinin Hero
Extensión: Serial
Parejas: Takanoo y otras...
Autora: Akari-chan
Capítulo 12
Nos besamos y
acariciamos levemente, sin llegar a nada sexual, aunque tuviéramos unas ganas
enormes de hacerlo, no era conveniente ya que no quería que abrieran las
puertas de ese ascensor y nos vieron haciendo esas cosas, pero al salir
tendríamos todo el tiempo del mundo para entregarnos como era debido.
- Te amo, te amo,
te amo – decía entre besos, en verdad que no podía creer todo lo que pasaba en
esos momentos, tenía a Daiki nuevamente entre mis brazos, y me amaba a mí, sólo
a mí -.
- Yo también –
dijo para después volver a capturar mis labios – quiero hacerlo – decía de
manera seductora -.
- Cuando salgamos
de aquí, iremos a donde quieras y lo haremos todas las veces que nuestros cuerpos
resistan – dije de la misma manera, apretando sus nalgas, a lo que él asintió
gustoso -.
Seguimos así hasta
que escuchamos como abrían la puerta, nos apartamos rápidamente, aunque en
verdad no queríamos hacerlo, pero teníamos que mantener las apariencias.
- Yuyan – dijo Daiki,
abrazando a su amigo –.
- Me alegra que
estés bien – dijo aliviado – pero Inoo-san también y el Técnico – agregó -.
- Muchas gracias –
dijo y luego me abrazó – vámonos – dijo al mismo tiempo que lamia el lóbulo de
mi oreja -.
- Tenemos que
hacer algo importante, muchas gracias – dije haciendo una reverencia y luego
tomar de la mano a Daiki, bajando juntos por las escaleras, teníamos un asunto
pendiente que atender -.
Llegamos al Hotel
que quedaba más cercano a la empresa, pidiendo una habitación y luego subir al
ascensor llegando rápidamente a ésta, mientras nos devorábamos a besos, la
espera se nos había hecho demasiado larga y no queríamos desperdiciar ni un
segundo más.
- Te amo – dije
para después arrojarlo sobre la cama, acomodándome sobre él, acariciando su
miembro por encima de la tela del pantalón, estaba completamente duro y eso era
algo que me calentaba mucho más -.
Me desvestía poco
a poco, besando cada rastro de piel que quedaba al descubierto, aunque ya
habíamos hecho esto en dos ocasiones, ésta vez se sentía diferente, sin estar
en estado de embriaguez y tampoco como una aventura de una sola noche, sino que
estaba a punto de hacer el amor con la persona que amaba y estaba en mis cinco
sentidos para entregarme completamente a él.
No quería quedarme
atrás, así que me dispuse primeramente a quitarle el saco y luego desabotonar
rápidamente su camisa, toqueteando su bien formado abdomen, al mismo tiempo que
aquel que estaba sobre mí suspiraba por cada caricia que le brindaba. Tomé su
rostro entre mis manos, besándolo nuevamente en los labios, profundizando cada
vez más el beso, entrelazando mis piernas alrededor de su cadera, sintiendo esa
dureza chocar con la mía, mordí su labio inferior, aprovechando esa distracción
para dar un giro, quedando encima de él, sentándome sobre su cadera, dando
saltitos sobre su miembro que se encontraba todavía preso entre sus pantalones.
Comencé a quitarle
primero el cinturón y luego bajé lentamente el cierre de su pantalón,
disfrutando de ver su rostro sonrojado, acariciando su miembro por encima de su
ropa interior, sacándole leves gemidos de su boca, quitando por completo esa
estorbosa prenda junto con sus pantalones, dejándome ver ese pedazo de carne
totalmente despierto, me relamí los labios y me acomodé, dejando mi rostro
frente a aquel miembro por el que me sentía ansioso de saborear y sin esperar
ni un momento más lo introduje en mi boca, succionándolo con fuerza.
- Da… Dai… me…
ven… go – decía entre jadeos, al mismo tiempo que sentía ese líquido blanco y
viscoso entrar en mi boca, disfrutando de su sabor -.
- Me encantas –
dije poniéndome de pie por unos momentos para quitarme lo que me quedaba de
ropa, bajo la intensa mirada de mi acompañante -.
- No me molestaría
que fueras así a mi oficina todos los días – dijo mientras se sentaba sobre el
borde de la cama y me tomaba de la cintura, lamiendo mi abdomen, al mismo
tiempo que tomaba mi miembro con una de sus manos y lo masturbaba -.
- Si no hubiera
tanta gente de por medio, de seguro que si lo haría – dijo seductoramente -.
- Pues en mi casa
podrías hacerlo sin tener que preocuparte de que la gente te vea – dijo apretando
una de mis nalgas, para luego acostarse sobre la cama, abriendo sus piernas, se
notaba que estaba loco por ser penetrado por mí, pero ese día tenía otros
planes -.
- ¿Sabes por qué
esa noche fue tan especial para mí? – preguntó Daiki, con un leve sonrojo que
lo hacía ver mucho más hermoso de lo que ya era -.
- No ¿Por qué?
- Porque a pesar
de que ya había estado con varios chicos antes de ti – decía al mismo tiempo
que se sentaba sobre mí, dejando cada una de sus piernas a un lado de mi
cadera, tomando mi miembro entre sus manos, volviendo este a ponerse duro – me
prometí a mí mismo que solamente una persona tendría tal privilegio y tú has
sido el primero y el único que me ha penetrado – dijo finalmente, aprisionando
lentamente mi miembro dentro de su entrada, sintiendo ese placer indescriptible
que hacía varios años quería volver a sentir -.
Veía como sus
lágrimas bajaban, habían pasado muchos años desde aquella vez y era obvio que
sin preparación previa, aquello sería doloroso, así que tomé su miembro con una
de mis manos comenzando a masturbarlo, mientras que con la otra acariciaba una
de sus tetillas, esperando que con eso pudiera relajarse y no pensara en el
dolor, cosa que dio resultado ya que poco a poco comenzaba a moverse, lo tomé
de la cintura para ayudarlo, entrando muchísimo más en él, hasta sentir como se
corría sobre mi pecho, tomando un poco con uno de mis dedos y saborearlo.
- Está delicioso –
dije sonriendo lascivamente, cambiando de posición, quedando él debajo de mí,
volviéndolo a penetrar, pero esa vez con mucha más fuerza, sacándole gritos de
placer, besando y mordiendo su cuello, deleitándome de todo su ser, hasta por
fin correrme en su interior, besándolo apasionadamente -.
Salí de su
interior, acomodando mi cabeza en su pecho, escuchando los agitados latidos de
su corazón, me sentía completo y con una felicidad que no se me quitaría con nada,
levanté un poco mi rostro para ver el suyo.
- Te amo – dije tomando
una de sus manos y luego lo besé dulcemente -.
- Te amo y ni
creas que te vas a escapar de mi tan fácilmente – dijo sonriente, volviéndonos
a besar y reiniciando de nuevo ese apasionado encuentro, recuperando el tiempo
perdido -.
Después de
rescatar al Presidente y a su asistente que habían quedado atrapados dentro del
ascensor, volvimos a nuestros respectivos trabajos y como siempre, Takaki-kun
se había ofrecido a ayudarme con el papeleo que tenía en mi oficina, aprovechando
que tenía algo de tiempo libre en esos momentos, me sentía muy feliz y a la vez
nervioso de tenerlo tan cerca de mí y más por los sentimientos que afloraban
desde hacía un buen tiempo, quería estar con él de otra manera muy distinta a
la de ser amigos, teniendo en infinidad de veces la necesidad de contarle lo
que había pasado esa noche en mi apartamento y ese día no era la excepción.
- Takaki-kun ¿te
puedo preguntar algo? – pregunté sin retirar la vista de los papeles que tenía
en mis manos -.
- Sí, claro –
respondió -.
- ¿Qué pasaría si
te enteras de algo que hiciste pero que no recuerdas?
- ¿Así como cuando
te secuestran los extraterrestres, experimentan contigo y te borran la memoria?
- No exactamente…
- Era broma – dijo
sonriente – Pero… ¿a qué se debe esa pregunta?
- No es nada, es
solo curiosidad – dije volviendo a lo que estaba haciendo, no tenía el
suficiente valor para decirle aquello -.
- Pues últimamente
he pensado en algo similar.
- ¿En qué?
- Es algo tonto,
pero tengo esa sensación de que debo de recordar algo, algo importante.
- ¿Cómo qué?
- Te he dicho que
es solo un presentimiento, uno que viene cada vez que pienso o veo a cierta
persona.
- ¿Y puedo saber
de quién se trata?
- No te lo puedo
decir, es… vergonzoso…
- Vamos, dímelo.
- Pero si te lo
digo quizás ya no querrás hablar conmigo – dijo algo triste -.
- No te preocupes,
no creo que sea algo tan grave como para dañar nuestra amistad.
- Pero puede que
lo haga.
- Ya verás que no.
- Esa persona, esa
persona… eres tú Inoo-san – dijo sonrojándose completamente, haciéndome sentir
algo cálido dentro de mí al escuchar aquello -.
- ¿Y en qué
piensas cuando me ves?
- Eso es lo
vergonzoso – dijo apenado - pienso en cosas que no debería de hacer con alguien
que solo me ve como un amigo.
- Ya veo – dije,
sintiendo en lo profundo de mi ser una felicidad inmensa – Eso quiere decir
que… ¿Te gusto? – pregunté ansioso por su respuesta -.
- Te amo – dijo
mirándome fijamente, podía ver aquella sinceridad en sus ojos – y si después de
esto ya no quieres ser mi amigo, pues lo entenderé – dijo levantándose de su
asiento dispuesto a irse -.
- No te vayas –
dije poniéndome de pie, acercándome a él -.
- ¿Pero para qué
me quedo? si igual sé que me vas a rechazar.
- ¿Y por qué
piensas que te rechazaré?
- Porque sé que
todavía amas a Yabu-sama.
- Eres un tontito,
Yabu y yo tuvimos mucho tiempo de relación, pero después de sus desplantes y de
enterarme de que me era infiel, ese amor que sentía ya no está.
- Pero no se
pueden olvidar esos sentimientos de la noche a la mañana.
- lo sé y créeme
que yo pensaba igual, pero cierta persona se encargó de que creyera en lo
contrario – dije tomando su rostro con mis manos y así besarlo por fin, quería
demostrarle que mis sentimientos por él eran sinceros y no había mejor manera
que esa -.
- ¿Qué fue eso? –
preguntó al momento de separarnos por la falta de aire -.
- Lo que haremos
de ahora en adelante, como novios – dije volviéndolo a besar, siendo
correspondido inmediatamente por él -.
Me sentía
totalmente agotado, además de trabajar como asistente de Nakajima-sama, también
trabajaba como modelo, por petición de Yasuda-san que me insistió varias veces
hasta que por fin logró convencerme, además los únicos que sabían que yo en
realidad era un chico eran ellos y mis amigos.
- Terminamos –
dijo Nakajima-sama y de inmediato me fui al camerino para cambiarme de ropa –
quedaste precioso – dijo éste entrando como si nada -.
- Voy a cambiarme,
así que vete – dije molesto -.
- Por eso vine –
sonrió – para ver cómo te cambias la ropa, si quieres, prometo no tocarte –
dijo al mismo tiempo que se sentaba en uno de los muebles, mirándome de una
manera no muy sana -.
- Muchas gracias,
pero no te voy a dar ese gusto.
- ¿Y a tu amiguito
si?
- Ya te he dicho
que eso no te incumbe y si fuera así, estaría gustoso de que fuera él quien me
viera desnudo.
- Pero no creo que
él desee eso – dijo levantándose de su asiento – tu eres solo su amigo y por lo
que sé, él está interesado en otro.
- Tú no sabes nada
– dije, sintiendo como mis lágrimas amenazaban con salir, él tenía razón, Yuya
jamás se hubiese fijado en mí -.
- Oh mi Yuri,
sabes lo que quiero – dijo acercando su rostro al mío – y si aceptas, te
prometo que te haré tocar el cielo, además siente como me tienes – dijo
tomándome de la cadera y bruscamente juntar su entrepierna con la mía,
sintiendo su miembro que estaba completamente duro debajo de su pantalón,
sacándome un gemido, para luego besarme, adentrando su lengua en mi boca,
quería resistirme pero mi cuerpo se negaba a responder, pero tenía que hacer
algo -.
- Eres de lo peor
– dije, empujándolo con fuerza, para después darle un fuerte golpe en el
estómago, derrumbándolo de inmediato – óyeme bien Nakajima Yuto – tomando mis
cosas – juro que jamás me acostaré contigo y que eso te quede muy claro.
- Si tanto me
odias… ¿por qué no renuncias? – dijo todavía en el suelo, totalmente adolorido
-.
- Porque no quiero
huir como un cobarde – dije finalmente, saliendo del camerino, volviendo a
buscar un lugar en donde cambiarme y en donde hacerme cargo de lo que tenía
entre mis piernas -.
Nos encontrábamos
en mi oficina, aprovechando nuestro tiempo de descanso para besarnos y acariciarnos
profundamente, con la parte superior de nuestros cuerpos totalmente al
descubierto, mientras tenía a Keito sobre mi escritorio, llevábamos tres meses
de novios, en los cuales éramos muy felices, pero todavía no habíamos tenido
sexo y eso aunque sonara tonto, me preocupaba un poco el hecho de que ambos éramos
vírgenes y por ende no quería hacer algo mal.
- Hikaru ¿en qué
piensas? – preguntó Keito al verme tan sumido en mis pensamientos -.
- En nosotros –
dije dándole un corto beso – en lo que hacemos en estos momentos – pasando uno
de mis dedos a lo largo de su pecho, haciéndolo estremecer –.
- Yo también he
pensado mucho en eso – dijo sonrojado – en que deberíamos llegar a algo más.
- Ya que será la
primera vez de ambos, tenemos que hacer que sea especial, en un lugar adecuado.
- Cualquier lugar
está bien, siempre y cuando sea contigo.
- Lo sé – dije besando
su frente – pero déjame esto a mí.
- Está bien,
espero que sea pronto.
- De eso puedes
estar seguro – dije volviendo a lo que estábamos, pensando en qué lugar sería
el indicado para ese acontecimiento tan importante -.
Me sentía
completamente feliz y a la vez avergonzado por todo lo que había pasado en ese
día, oficialmente era el novio del gran amor de mi vida y de tan solo pensar en
aquello ya era suficiente para mantener una gran sonrisa durante el resto del
día y lo que me avergonzaba era que Inoo-san me había contado lo sucedido
aquella noche que me embriagué y de la cual no me acordaba nada, sintiéndome
tan apenado de haber hecho esas cosas, pero eso ya no importaba, ahora estaba
con Inoo-san y lo haría la persona más feliz del mundo.
CONTINUARÁ...
moje mis bragas (?) :'v
ResponderEliminarasdasdasdasd al fin el AriYama!!!.... al fin el TakaNo (aunque no me guste)
HikaTo!!! *^*
ese chinen!!! dejate follar por Yutooooo!!! bakaaa!!!
Awwwwwww el ariyama! El ariyama me enamoró de veras! Y el takanooo ~
ResponderEliminarChii tan tozudoooo!
Espero conti *A*
DEMASIADO AMOR!! *^*
ResponderEliminartodo sería perfecto si Yabu muriera pronto (? XD
hahahaha ok no