Primero que todo quiero desearles a todos una FELIZ NAVIDAD (Aunque sea un poco atrasada) 😅
Espero que la hayan pasado muy bien y que recibieran muchos regalitos. 💗
Muchas gracias por todo el amor y el cariño a este fic, no saben lo feliz que me hace el que les guste y como ésta será mi última publicación del año les deseo también un próspero y feliz año 2019, que espero que me sigan acompañando por acá, todavía hay fics para rato. 😉💪
Como siempre este fic va dedicado a mi querida amiga Mari 💖
Y también quiero darle un saludo especial a Yojhannah Tomatito que es una muy fiel seguidora y que me alegra siempre leer sus comentarios.
Bueno, ya sin más les dejo el fic, que lo disfruten 💟
Tema: Father's Love
Extensión: Serial
Parejas: Varias
Autora: Akari-chan
Capítulo 49
*Maruyama Ryuhei*
- Daiki, ¿te molestaría
si vas solo a la mansión?
- ¿Eh? ¿Por qué? –
Pregunta notablemente asustado.
- No te preocupes, si voy
a ir - río al causarme gracia su expresión - pero creo que no alcanzo a venir a
recogerte para ir juntos.
- Ah, ya ¿y eso?
- Es que tengo unas cosas
que hacer en el banco y creo que no me va a dar el tiempo.
- No pasa nada, igual
quedé de encontrarme con Kei para hacer unas compras y pues iré directamente con
él entonces.
- Me alegra saber eso –
sonrío – bueno, ya me voy – digo tomando mi bolso y revolviendo un poco sus
cabellos – nos veremos allá.
- Sí papá que te vaya muy
bien – dice sonriente antes de verme salir por la puerta.
Pasar gran parte de la
víspera de navidad en un banco no me parecía la mejor cosa por hacer, pero no tenía remedio, si no cumplía con mis deberes de adulto hoy, para mañana sería
tarde, aunque no puedo evitar pensar en lo que vendrá ésta noche, me siento un
poco intranquilo
Después de terminar con
todos los trámites, me sorprendí de haber terminado un poco más pronto de lo
que tenía previsto, así que aproveché para ir a merendar y dar algún paseo por
las transitadas calles de la ciudad.
- Disculpe ¿Es usted
Maruyama Ryuhei? – Pregunta de repente un extraño hombre, haciéndome parar en
seco.
- Si… Soy yo… - Digo
sintiéndome algo nervioso, pero no tuve tiempo para huir o decir algo más
porque de inmediato todo se volvió oscuro.
*Murakami Shingo*
- Uchi, en verdad no creo
que esto sea necesario – digo siendo llevado de la mano por mi novio, caminando
por las calles llenas de gente.
- Pero es que vas a
conocer hoy a tus consuegros, tienes que ir bien vestido.
- Pero yo en casa tengo
varios trajes.
- Lo sé, pero ya están
desgastados y viejos ¿desde hace cuánto que no compras uno?
- Como 6 años.
- ¿Ves? Por eso tienes
que comprar uno para hoy – dice sonriente.
- Pero para hoy todo va a
estar más costoso de lo que ya de por sí es.
- Mi amor, el comprar un
traje nuevo no te va a empobrecer.
- Está bien, tú ganas –
digo ya resignado, dejándome llevar por mi amor.
*Maruyama Ryuhei*
Abro mis ojos lentamente,
sintiendo un ligero dolor de cabeza, pero no hay tiempo para preocuparme por
eso, al estar completamente despierto me doy cuenta de que he estado todo este
tiempo durmiendo sobre un sofá, notando también que me encuentro dentro de un
gran salón…
- Ya despertaste, me
alegra mucho – dice una voz femenina entrando al salón, sorprendiéndome al ver
a esa mujer que hace poco había tenido la oportunidad de por fin conocerla.
- ¿Qué hago aquí? –
Pregunto temblando de los nervios.
- Relájate, no te va
pasar nada malo – sonríe.
- ¿Entonces por qué me
has secuestrado?
- Yo no te he secuestrado
– ríe – de hecho te puedes ir cuando quieras, sólo quería hablar contigo antes
de la cena.
- ¿Hablar de qué?
- Sobre Yoko.
- Perdón ¿pero qué tengo
que ver en eso?
- No te hagas el que no
entiende, yo sé muy bien qué tipo de relación tienen ambos, incluso desde antes
que me casara con él.
- Esto…
- No te preocupes, toma
asiento, todavía falta mucho para la cena así que podemos hablar con calma –
sonríe - ¿Quieres un té o un café?
- Un té estaría bien –
sonrío nervioso.
*Rika*
-
Nuestras más sentidas condolencias – dijo mi madre haciendo una reverencia en
frente del reciente viudo y su hijo, quién no dejaba de llorar.
Nunca
había tenido la oportunidad de hablar con él y aunque quería consolarlo en aquellos
momentos, no podía hacerlo, había creado como una especie de caparazón
alrededor de él que lo hacía completamente inaccesible.
Pasaron
un par de años para que pudiera adentrarme en esa coraza y todo fue gracias a
la amistad que había establecido con su amigo Aiba-chan y junto con él nos
volvimos inseparables, logrando sacar aunque fuera una pequeña sonrisa en su
tan deprimido rostro, quería protegerlo, decirle que era lo que más amaba en el
mundo y que como tal no quería apartarme ni un momento de él.
El
día de separarnos por un largo tiempo llegó y con ese cambio de ciudad, llegó
el amor para él. Nunca pude verlos juntos, pero según lo que me contaba Aiba, Yoko
estaba realmente feliz.
Mi
corazón no dejaba de doler de tan solo pensar en que yo no había sido la
persona que había conseguido que Yoko sonriera sinceramente, por un tiempo
sentí odio por ese ser que me había arrebatado lo que más quería. Pero luego de
meditarlo me sentí aliviada y feliz de saber que estaba tan alegre, así que no
quise intervenir.
-
Rika-chan, te casarás con Kimitaka – dijo de repente Yokoyama-san, durante una
sorpresiva visita en la mansión de mi familia y todo bajo la completa
aprobación de mis padres.
-
Pero señor yo…
-
Sé muy bien que estás interesada en mi hijo y estoy de acuerdo en que te cases
con él.
-
Pero…
-
No aceptaré un no como respuesta, la decisión ya está tomada – dijo finalmente
para luego irse así como llegó.
-
¿No estás feliz hija? – Preguntó mi madre emocionada.
-
Eso creo… - Dije dando un profundo suspiro.
Cuando
volvió a Tokyo, aquella sonrisa que tanto me describía Aiba había desaparecido,
era como si hubiese retrocedido en el tiempo y hubiésemos vuelto al día del
funeral de su adorada madre.
-
Yoko, si no te quieres casar conmigo no hay problema, podremos hablar con tu
padre y convencerlo…
-
Rika… La decisión ya está tomada – dijo serio.
-
Pero no quiero ser un obstáculo en tu vida - estuve un tiempo dolida de saber
que Yoko no me había tenido la suficiente confianza para contarme lo de su relación,
quizás por lo que llegara a pensar de ese tipo de relaciones, pero aun así no quise
sacar ese tema a relucir y él nunca supo que yo en verdad lo sabía.
-
Me casaré contigo, además si lo pensamos bien pudo haber sido peor.
-
Que malo eres – dije haciendo un puchero, viéndolo sonreír levemente y lo
abracé fuertemente, pensando en que estaría bien en ser algo egoísta.
La
boda se realizó por todo lo alto, no hubo persona de la alta jerarquía japonesa
que no haya asistido y yo me sentía la mujer más afortunada del mundo por
casarme con la persona que tanto amaba.
Durante
todos nuestros años de matrimonio Yoko había demostrado ser un gran esposo y
sin duda un magnífico padre, pero a pesar de lo perfecta que pudiera parecer
nuestra vida, en el fondo sabía que él nunca me amaría tanto como yo lo hacía
con él y el día que murió su padre supe que era el momento de dejarlo libre.
-
Divorciémonos – dije viendo como los ojos de Yoko se abrían ampliamente.
-
¿Pero qué dices? ¿Por qué?
-
Yoko, sé muy bien que no me amas y que nunca lo harás – dije con notable
tristeza, pero firme con mi decisión – quiero que seas libre.
-
¿Libre? – Preguntó mirándome confundido.
-
Sólo di que aceptas, no hagas más doloroso esto – dije sin poder evitar que mis
lágrimas comenzaran a bajar por mis mejillas.
-
¿Estás segura?
-
Totalmente - dije entre sollozos, pero sabía que era lo mejor para ambos.
*Maruyama Ryuhei*
- Yo… En verdad lo
siento… - Digo sintiendo una gran tristeza en mi corazón.
- No tienes por qué
sentirte mal – dice acercándose a mí con una gran sonrisa – Fue una decisión
difícil para mí, pero sin duda fue lo mejor para todos – dice tomando mis
manos.
- Pero aun así tú…
- No te preocupes por mí,
ese tema ya está superado, lo único que me importa es que ustedes dos sean
felices y por eso me vi en la necesidad de aclarar las cosas contigo – sonríe –
y lamento haberte asustado, pero pensé que quizás te ibas a negar en venir.
- No vuelvas a hacer algo
así – río – si quieres hablar conmigo sólo dímelo y vendré – digo sintiéndome
mucho más tranquilo - ya veo de dónde sacó Keito su chispeante personalidad.
- Eso me dicen muy
seguido.
- Pero de todos modos
gracias.
- Gracias a ti por
escucharme y no tengas miedo de amar a Yoko, él te adora y su felicidad es la
mía también – dice dándome un abrazo, al que correspondo en seguida – Y ya que
estás aquí ¿quisieras ayudar con los preparativos de la cena?
- Encantado – digo
sonriente, mientras ella se aferra a uno de mis brazos y salimos del salón
*Hikaru*
- ¿Cuánto pagarán de luz
en ésta casa? – Pregunta mi papá mirando sorprendido la mansión de la familia
de mi novio, con miles de luces recubriéndolo.
- Creo que no podemos
preguntar eso – dice Uchi-san mirando sorprendido también.
- ¿Vamos a entrar o se
van a quedar mirando?
- ¡Hikaru no me hables así!
– Dice mi papá al mismo tiempo que me da un golpe en la cabeza.
- Auch – digo
adolorido.
Después de pasar por el
portón, fuimos directamente hacia la entrada de la mansión, siendo recibidos
por mi suegra quién no deja de abrazarme.
- Es un gusto conocerlo
Murakami-san, su hijo es simplemente encantador.
- Gracias señora.
- No me diga señora que
me hace sentir vieja, puedes llamarme Rika.
- Está bien, Rika.
- ¿Y quién es el guapo
joven que lo acompaña?
- Es mi novio.
- Se ven tan adorables –
sonríe – pero que grosera soy, pasen, están en su casa – dice haciéndose a un
lado para dejarnos entrar, causándome gracia el ver a mi padre y a Uchi-san
mirar todo con asombro.
- Papá, disimula.
- Yo nunca había estado
en un lugar así – susurra Uchi-san, mientras vamos de camino a la sala del
comedor, encontrándome con mi novio quién me recibe con un abrazo y un beso.
*Yokoyama You*
- Bienvenido
Yokoyama-sama – dicen Mizuki-chan y Ayumi-chan haciendo una reverencia.
- En la sala del comedor
ya están todos los invitados, sólo falta usted señor.
- Gracias chicas, si
quieren ya pueden retirarse, nosotros nos encargaremos del resto.
- Muchas gracias señor,
Feliz Navidad – dicen ambas emocionadas, retirándose rápidamente luego de
reverenciarse.
- Lamento mucho la
tardanza, pero el tráfico estaba terrible – me disculpo al llegar a la sala, sonriendo
de verlos a todos reunidos y más a Maru-chan.
- Estábamos esperándote,
toma asiento – dice Rika indicándome mi lugar de siempre, ésta vez junto a
Maru-chan.
- Te ves precioso – digo
en un susurro, a la vez que tomo su mano por debajo de la mesa.
- Tu también – dice con
un leve sonrojo en su rostro.
- Buenas noches a todos –
saluda Rika-chan, poniéndose de pie - ya
que estamos por fin todos reunidos quiero aprovechar para agradecer el que
pudieran venir a celebrar con nosotros esta festividad tan hermosa – sonríe –
en verdad estoy muy feliz de tenerlos a todos acá y poder conocerlos mejor,
porque de ahora en adelante seremos una gran familia – dice mirando hacia mi
lado – y especialmente celebrar la hermosa relación de Yoko y Maru-chan que
luego de muchos años han decidido darse una segunda oportunidad.
- Rika…
- ¡¿EH?! – Exclama Maru-chan
totalmente avergonzado.
- No te avergüences papá,
ya todos lo sabíamos desde hacía mucho – dice Daiki sonriente.
- Nosotros fuimos los
encargados de juntarlos nuevamente – dice Keito con orgullo.
- Y yo – dice Aiba-san
mostrando una gran sonrisa.
- Ustedes son lo peor –
dice Maru-chan en tono de burla – pero gracias – dice mirándome con ternura, dándome
un dulce beso de repente, ante las alegres miradas de todos los presentes.
*Okura Tadayoshi*
- Jamás pensé que
llegaría el día en el que celebraría navidad con sopa de miso – digo mirando la
taza que tengo entre mis manos con dicho contenido.
- Pero es por tu bien mi
amor – dice mi esposo tratando de reconfortarme – además no creo que a alguno
les moleste ¿cierto chicos?
- No, claro que no – dice
Kota con una cálida sonrisa mientras que los demás asienten.
- De hecho nos sentimos
muy felices porque ésta es la primera navidad que celebramos en familia – dice
Yuri alegremente.
- Y más porque podemos disfrutarla
junto contigo – dice mi esposo dándome un dulce beso.
- Además vendrán muchas
navidades más y en ellas podremos comer hasta reventar – dice Yuya
entusiasmado.
- Bueno, hasta reventar
tampoco – dice mi esposo – Yoshi tiene que cuidarse mucho con su alimentación
de ahora en adelante.
- Eso no es divertido –
digo haciendo un puchero, viendo como todos ríen alrededor de la mesa.
- Podemos hacer cosas
mucho más divertidas cuando te recuperes – susurra mi esposo cerca de mi oído, haciéndome
sonrojar.
- ¡Son tan lindos! – Exclama
Yuri emocionado, haciéndonos avergonzar pero a la vez sintiéndome feliz de
compartir esta festividad con mi hermosa familia.
*Nishikido Ryo*
Después de la cena de
navidad preparada en ésta ocasión con tanto esmero por Ryosuke, nos quedamos
los cuatro reunidos en la sala un tiempo más después de la media noche, hasta
que los más jóvenes decidieron irse a dormir. Aprovechando el estar ya solos
para acostarnos muy juntitos sobre el sofá, frente a frente.
- Te amo Subaru – digo dándole
un dulce beso en los labios, sintiéndome totalmente dichoso de tenerlo a mi
lado.
- Yo también te amo –
dice dándome otro beso, al que correspondo con gusto.
- He estado pensando…
- ¿En qué? – Pregunta mientras
acaricia mis cabellos.
- En que deberíamos de
decirle la verdad a Ryosuke.
- ¿Estás seguro? –
Pregunta serio.
- Creo que es mejor que
se entere por nuestra boca y no de otra manera.
- Si eso es lo que
quieres cuenta conmigo – sonríe con cariño - aunque tienes que prepararte para lo
que vaya a acarrear esto.
- Lo sé y por eso he tomado
la decisión de decírselo – digo abrazándolo con fuerza, el sentir el calor de
Subaru es demasiado acogedor y me da el valor para seguir adelante.
CONTINUARÁ...
Oh Dioa, me has saludado asdfghkkjllbjh ya me puedo morir(?) Bueno, tal vez no, pero estoy muy agradecida.
ResponderEliminarAntes que siga, dejame decirte que estuvo maravilloso el capitica, mucho maa por que al fin de todo se han vuelto una gran familia la de Inoo y Keito, aunque me causa mucha intriga Ryutaro con Kota ¿Sera que el siguiente año se cumpla mi deseo? Eapero que sí, y con Ryosuke, que los dioses del olimpo los protejan, por que seguro que hará un mega drama.
Estuvo margnifico, me encanto, aqui andaré para el siguiente capítulo.
Feliz navisad atrasada y feliz año nuevo, por más capitulos asi de maravillosos!! Mucho éxito y salud.
Este dia es mu cumple, se que bo debería, pero por favor, que este mes empiece a salir Ryu con Kota~ me encantaría leer eso juju
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